4 de junio de 2011

El pensamiento mítico (Filosofía y Lógica RRHH)

El pensamiento mítico.



Se entiende por filosofía una manera totalmente nueva de pensar que surgió en Grecia, alrededor del año 600 antes de Cristo.
Hasta entonces, fueron las distintas religiones las que dieron a la gente las respuestas a todas las preguntas que se hacían.
Esas explicaciones religiosas se transmitieron de generación en generación, a través de los mitos. Un mito es un relato sobre dioses, un relato que pretende explicar el principio de la vida.
Por todo el mundo ha surgido, en el transcurso de los milenios, un enorme caudal de explicaciones míticas a las cuestiones filosóficas.
Pero no se trataba solamente de explicaciones, pues la gente no podía quedarse sentada de brazos cruzados a que interviniesen los dioses cuando amenazaban las desgracias (tales como sequías o epidemias).
Las personas tenían que tomar parte activa en la lucha contra el mal. Esa participación se llevaba a cabo mediante distintos actos religiosos o “ritos”.
Uno de los actos religiosos más importantes era el sacrificio, que se hacía con el fin de aumentar el poder del dios. Los seres humanos tenían que hacer sacrificios a los dioses para que éstos reuniesen fuerzas suficientes para combatir a las fuerzas del caos. Esto se conseguía, por ejemplo, mediante el sacrificio de un animal al dios en cuestión.
Los mitos pretenden dar una explicación a algo. Por ejemplo, si había sequías en una región, la gente necesitaba una explicación acerca de por qué no llovía.
Los mitos también pueden querer dar una explicación a los cambios de estación del año.
El mito intenta dar a los seres humanos respuestas a algo que no entienden, y a menudo los seres humanos realizaron distintos actos religiosos relacionados con el mito.
Las ideas mitológicas florecieron por el mundo entero, antes de que los filósofos comenzaran a hurgar en ellas.
También los griegos tenían su visión mítica del mundo cuando surgió la primera filosofía. Durante siglos, habían hablado de los dioses de generación en generación.
Algunos dioses griegos se llamaban Zeus y Apolo, Hera y Atenea, Dionisio y Asclepio, Heracles y Hefesto, por nombrar algunos.
Alrededor del año 700 a.C., gran parte de los mitos griegos fueron plasmados por escrito por Homero y Hesíodo, creando así una nueva situación, pues al tener escritos los mitos, se hizo posible la discusión sobre ellos.
Los primeros filósofos griegos criticaron la mitología de Homero porque los dioses se parecían mucho a los seres humanos, y eran igual de egoístas y tan poco confiables como podemos serlo nosotros. Así, se planteó la posibilidad de que los mitos no fueran más que imaginaciones humanas.
Un ejemplo de esta crítica de los mitos, es la opinión del filósofo Jenófanes, que nació en el 570 a.C., quien decía que los seres humanos han creado dioses a su propia imagen, y que creen que los dioses han nacido y que tienen cuerpo, vestido e idioma como nosotros.
En los ambientes urbanos de las ciudades-estado griegas, fue evolucionando la manera de pensar de la gente. Así, un individuo podía, por cuenta propia, plantear cuestiones sobre cómo debería organizarse la sociedad.
De esta manera, el individuo también podía hacer preguntas filosóficas, sin tener que recurrir a los mitos heredados.
Así tuvo lugar una evolución de una manera de pensar mítica, a un razonamiento basado en la experiencia y la razón, siendo el objetivo de los primeros filósofos, la búsqueda de explicaciones naturales a los procesos de la naturaleza.